lunes, 28 de marzo de 2022

- Siega Verde…… preludio de Arte

Pincha aquí si deseas ver las fotos de "Siega Verde" y si quieres verlas en pantalla completa pulsa en la tecla "F11"

Volvemos de nuevo a las orillas del Águeda, escarpadas riberas por las que ya estuvimos en el otoño de 2021 cuando recorrimos el abandonado, pero singular trazado del Ferrocarril de La Fregeneda. Esta vez nos encaminamos más al sur, a tierras de Ciudad Rodrigo, urbe que nos recibe teñida de color "sepia" por coincidir nuestra visita con esos turbadores días en los que llegó hasta nuestras latitudes esa inmensa polvareda de arenas saharianas que tiñeron cielo, tierra, coches e incluso edificios de tonos rojos, hasta donde el ambiente callejero parecía sacado de una película realizada con filtro bermejo.

Tributario del Duero por la izquierda, el río Águeda tiene una longitud aproximada de 130 km. y con un caudal medio de 13,40 m3/s (cuatro veces la del río Manzanares), se le puede catalogar como un verdadero rio aunque no salga de la provincia de Salamanca. Nace al noroeste de la Sierra de Gata, a tan solo 600 metros de la linde con Extremadura, a 900 de la raya con Portugal y a algo más de un kilometro del manadero de su gemelo el Côa portugués. A mitad de su recorrido discurre por la histórica, monumental y populosa población de Ciudad Rodrigo, que envuelve dejándola a su derecha, siendo salvado por tres puentes para acceder hasta ella. Pues hete aquí, que desde esta villa hasta su desembocadura en el rio Duero (donde existe el puente internacional que nos cruza a Portugal), no hay ningúna otra conexión para vehículos en todo su curso que el puente existente en Siega Verde, lo que equivale a estar durante cerca de 60 kilómetros incomunicados los vecinos de una y otra ribera (que apunten esto los de la España Vaciada, que a lo mejor lo desconocen). 

Estamos en el cauce medio del río, en su último vado natural, justo en el punto donde el Águeda comienza a encajonarse y a formar su propia "arribe" (vertiente escarpada), que no solo el Duero y sus arribes para ello tiene su exclusiva. Un lugar de paso y un extraordinario paraje donde antaño, antaño, se podía cazar en abundancia, como así mismo observar las "bestias" con pleno detenimiento, ya que hasta aquí llegaban para cruzar el regato y también para saciar su sed. Nos situamos justo bajo el Puente de Siega Verde o de la Unión, punto de enlace de las poblaciones de Castillejo de Martin Viejo y Serranillo, lugar donde antaño quedaban los vecinos de ambas orillas para los baños estivales y otros festejos. Allí donde en tiempos se situaba un mesón ya desaparecido con el nombre de "Siega Verde", siendo posiblemente este "bareto" quien ha dado la denominación al sitio, hoy esta instalación ha sido sustituido por el Centro de Interpretación del yacimiento arqueológico. No sabían los lugareños por los años 60 y 70 del siglo pasado de la importancia del enclave, pues las rocas en que apoyaban sus espaldas durante las comidas campestres estaban repletas de figuras, arañazos y picoteados, que les eran  atribuídos a mozos de épocas pretéritas. 



Y efectivamente de épocas pretéritas y bien pretéritas eran esas figuras y caracteres, ya que después de analizadas por Manuel Santonja en 1988 (director por aquel entonces del Museo de Salamanca) se dataran como del paleolítico superior hace unos 18.000 años, cuando aun nuestro planeta estaba en plena glaciación o era de los hielos, y la temperatura media del planeta estaba cuando menos 6 grados por debajo de la actual. Fue un joven pastor de la aldea de Serranillo, Ángel Hervalejo, que apacentaba a sus ovejas por este enclave, quien dio reseña al arqueólogo salmantino, identificando primeramente el denominado el “Caballo del Descubrimiento”. Pero este no fue un caso aislado ya que sucesivamente se fueron encontrando más y más, hasta llegar a la actualidad, en que se tienen catalogados 96 situados (paneles) con aproximadamente 650 figuras o representaciones de estas expresiones artísticas del pasado. 

Este hallazgo, aun siendo el primero no fue el único, pues poco tiempo después se encontraron equivalentes figuraciones en la vecina Hoz del Côa portugués así como en otros situados, motivando con ello hacer una nueva y extraordinaria revisión del concepto sobre el arte paleolítico y su simbología. Durante tiempo se pensó que el arte rupestre se desarrollaba únicamente en el interior de las cuevas, creando con las pinturas rupestres lugares de especial simbolismo en lo más interno de las cavernas, generando verdaderos santuarios o lugares rituales. Con la aparición de estos grabados en las rocas de exterior, esta teoría se ha trastocado del todo, estando actualmente los arqueólogos-antropólogos desarrollando nuevas conjeturas que den credilidad y confianza a sus tesis. Este hecho sin duda ha convertido un arte de penumbra en el interior de las oquedades, en un arte de luz y vida hacia el exterior de sus hábitats. 



Al recorrer los más de 1.300 mts. del espacio que ocupa el yacimiento en la orilla izquierda del río, donde se suceden los afloramientos rocosos formados por esquistos de pizarra, observamos como de forma mayoritaria se han utilizado los paramentos lisos y verticales para trasladar en ellos las imágenes que nuestros antepasados no han dejado como regalo. 

Una excepcional concentración de grabados, donde podemos identificar decenas de equinos (caballos), uros (toros salvajes prehistóricos de hasta 2 mts. de altura), cabras, ciervos, bisontes, rinocerontes lanudos y hasta un cánido (posiblemente un lobo), poseyendo muchas de ellas señas añadidas de detalles fisiológicos como: ojos hocicos, bocas, crines, músculos e incluso pelaje, lo que nos traslada el conocimiento sobre el animal en cuestión, y la forma de trasladarlo a imagen que tenía el autor del grabado. Fauna que habito estos territorios por aquellas épocas y que en algunos casos se extinguieron hace miles de años. Aparte de las representaciones animales que podrían tener un significado relativo con la caza, aparecen también formas abstractas no figurativas y signos esquemáticos, cuya simbología se escapa a nuestras entendederas. Los distintos motivos que podemos observar trazados en las rocas, se sitúan en grupos de entre dos y seis figuras de tamaños medio, aunque también se encuentran representaciones aisladas en pequeñas rocas sueltas. 

Las técnicas usadas por estos pobladores eran muy simples, teniéndose casi la certeza de que primeramente se bosquejaban sobre las rocas las distintas ilustraciones, para después remarcar a modo de grabación su tallado en la piedra. Las distintas figuras se fueron realizando por los métodos de: piqueteado de contorno, incisión y abrasión, siendo la primera de ellas la que más predomina. Para realizar esta, golpeaban sobre la pizarra con un objeto duro y afilado hasta dejar toscamente perfilado a base de puntos el contorno de la figura representada. La incisión o grabado fino se observa en menor medida y posiblemente se realizara en periodos posteriores, siendo su realización más refinada cual si fuera un dibujo a lápiz sobre papel, aunque para poder observar estos últimos, tengamos que pones más atención y un acercamiento al sujeto más sustancial. Por último la abrasión o rallado se utilizó para crear volúmenes o simular la cubrición de los cuerpos con pelamen. En cualquiera de los casos, la precisión de los grabados nos ha dejado imágenes prácticamente reales y de una gran plasticidad, teniendo una enorme sutileza y una asombrosa precisión. Legado que ha podido llegar prácticamente intacto hasta nuestros días, gracias a su dificultosa percepción y su tardío descubrimiento. 



Ya he comentado que las representaciones existentes en cada roca pueden ser plurales o encontrarse en soledad, también pueden intentar representar movimiento o encontrarse estáticas, pero se nos escapa todavía un significado "claro" de estas expresiones plásticas, existiendo varias teorías aportadas por diferentes expertos e investigadores sobre el simbolismo y la expresión de este arte rupestre. Algunas texis plantean rituales mágicos para favorecer sus capturas en la caza, otras se refieren a marcar territorio con respecto a otras tribus o grupos humanos ajenos. Hay quienes defienden cultos a la fecundidad, y otros nos aportan teorías sobre el totemismo o incluso el chamanismo. Los que menos se comen la cabeza nos trasladan que son expresiones que se desarrollan en base al arte por el arte………. pura forma de expresarse de nuestros progenies. 

Lo que podemos apreciar en Siega Verde, no es algo señero, exclusivo o casual que solo podamos apreciar en este lugar, es una forma de expresión  del ser humano que vivió es estos lugares, dejando su impronta sobre las rocas hace decenas de miles de años. Que por motivos aun sin descubrir se desarrollan más en unas zonas que en otras, pudiendo encontrar no muy alejados del las riveras de Águeda, el yacimiento hermano del portugués Valle del río Côa, del que apenas les separa 15 kilómetros. O el también, en este caso "primo" del Arroyo de las Almas, ya casi en la desembocadura del río Águeda al Duero, en la carretera que desciende desde La Fregeneda hasta el muelle fluvial de Vega Terrón. Cursos fluviales por los que discurrían las rutas o periplos humanos en los pasados tiempos del paleolítico. 

El recorrido para poder visitar Siega Verde es siempre guiado, pudiéndose realizar dos tipos de itinerario: uno breve en el que se recorren 5 paneles solamente, o la ruta completa donde se exploran los 14 paneles de rocas visitables, mediante un circuito que dura entre 1,30 y 2 horas. Además durante el tiempo estival se realizan visitas nocturnas, donde la observación de los distintos caracteres de las representaciones son sorprendentes antes las luces artificiales proyectadas sobre ellos. Si podemos elegir horario, es aconsejable la vista mañanera, siendo durante esta parte del día cuando la luz del sol ilumina mejor los grabados. 

Considerado como el conjunto de grabados paleolíticos al aire libre más significativo de Castilla y León y el más importante del territorio hispano, el yacimiento arqueológico de Siega Verde fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) por la Junta de Castilla y León en1998, formando parte del Itinerario Cultural del Consejo de Europa "Caminos de Arte Rupestre Prehistórico". Y aunque la UNESCO lo declaró Patrimonio de la Humanidad en el año 2010, la administración autonómica no le ha sabido dar la relevancia que tiene, estando a años luz de la promoción, estudio e investigaciones que nuestros vecinos lusos están desarrollando en el Valle del Côa, esperemos que con estos movimientos de la "España Vaciada"…………… la cosa cambie. 

Durante los años 1990 y 1991 se realizaron sendas pesquisas para la búsqueda de nuevos grabados en el entorno de Siega Verde, llegando hasta el Puente de los Franceses en Puerto Seguro, 25 km. aguas abajo del río Águeda. Y aprovechando que "el Pisuerga pasa por Valladolid, el Tormes por Salamanca y el Duero por Soria", no quiero desaprovechar esta reseña, para dejar constancia de una infraestructura que pasa desapercibida (como tantas otras veces) en nuestro entorno, pero que a mi "corto entender" ha sido de bastante importancia para la zona, por lo menos así lo entendieron los romanos. Y aunque se salga del tema del "arte rupestre", quiero hacer referencia de la existencia del antes mencionado "Puente de los Franceses" aunque antaño se le apodara como "Puente de Barba del Puerco", llevando en insigne y antiguo nombre de la cercana población situada a poniente.  

De origen romano; al igual que la calzada que lo cruza y conocida como la de "El Abadengo" (tierras bajo la jurisdicción de un abad, en este caso pertenecientes a la Orden del Temple); el puente se sitúa en un paraje de excepcional rudeza y hermosura, en medio de las vertiginosas pendientes que forman las "Arribes del Águeda" entre San Felices de Gallegos y el rebautizado (en 1916) como Puerto Seguro. Esta ruta que en su día fue una incuestionable vía de conexión entre estas tierras iberas del poniente, desde los tiempos del "Imperio" latino, siguieron siendo de trascendental importancia durante el mediebo y hasta la entrada del siglo XIX, toda vez que era el único paso construido sobre el rio entre Ciudad Rodrigo y la desembocadura del Águeda en el Duero, transitando por él las vías y rutas que recorrían de este a oeste y vuelta. 

El puente en cuestión, sirvió para que los "gabachos" al mando de Napoleón pudieran salvar su pellejo durante nuestra mal llamada "Guerra de la Independencia", al tener que huir de la portuguesa y fronteriza población de "Almeida" (sin Martínez), al ser vencidos por las tropas inglesas al mando de Wellington, batiéndose en retirada hasta la población de San Felices de los Gallegos. Siendo durante estos escarceos bélicos de comienzos del siglo XIX, cuando parte del puente fue dinamitado a comienzo de la primavera de 1812. Reconstruido en 1844 y recompuesto en 1906 tras una fuerte crecida del río, hoy por entre sus pretiles solo transitan intrépidos viajeros e incansables senderistas, que se atreven a descender hasta él para disfrutar de la magia que este lugar casi olvidado del mundo desprende. 

Fue también Lord Wellington, quien ante la falta de puentes para cruzar el Águeda, durante la contienda contra los franceses en tierras hispanas, tuvo que ingeniarse un puente provisional de "caballetes" para hacer pasar su artillería y llegar a la sitiada Ciudad Rodrigo. Lo montó en el "Vado de Flores", entre las aldeas de Gallegos de Argañan y Saelices el Chico, estando formado por 32 de estos soportes de tijera, llegando a alcanzar una longitud de 160 varas (unos 134 mts). Este improvisado cruce se situó 8 km. rio arriba de Siega Verde, con lo que imaginamos que el insigne militar ingles no llegó a descubrir los grabados rupestres de sus rocas, perdiéndose la oportunidad de su admiración, sin embargo sí que pudo recuperar la Ciudad de Rodrigo a los franceses. 

Aquí os he propuesto una curiosa, diferente y bonita excursión que se puede completar con la visita de la ciudad de Salamanca, la urbe de Ciudad Rodrigo y algunos perdidos lugares por la siempre interesante "Raya Portuguesa"…………….. ya me contareis. 




miércoles, 9 de marzo de 2022

- Flysch de Zumaia…… la Historia Geológica del Planeta

Pincha aquí si deseas ver las fotos de "Flysch de Zumaia" y si quieres verlas en pantalla completa pulsa en la tecla "F11"

Poco a poco la ciencia va reeditando la historia, el "big-bang" y la consecuente creación de universo sucedió aproximadamente hace unos 13.800 millones de años, estimándosele a nuestro planeta una vida de 4.600 MA (millones de años). Con el aumento de los conocimientos científicos, vamos teniendo nuevos datos sobre la creación del mundo, quedándose las viejas escrituras del "Génesis" en mero relatos de ficción, como si de una novela fantástica se tratase. 

Estos datos sobre la historia de nuestro planeta están bajo nuestros pies, escritos es las rocas de las profundidades terrestres, solo hay que buscar los sitios donde poder leerlos, ya que en algunos casos y debido a los movimientos terrestres estos testimonio pétreos han aflorado a la luz de la superficie. Es el caso de la Costa Cantábrica, donde se pueden apreciar los denominados "flysch", que extendiéndose desde la costa del suroeste francés en San Juan de Luz, hasta el litoral asturiano de San Pedro de Antromero (proximidades del Cabo de Peñas), nos dan abundantes pistas de como ha ido evolucionando el mundo en el que nos ha tocado vivir. 



Es en esta fría, húmeda, agreste y hermosa costa cantábrica, donde con mejor proximidad y detalle podemos observar el fenómeno geológico denominado "flysch". Palabreja de origen teutón que viene a indicarnos algo así como "resbaladizo", que no es ni más ni menos que un sinfín de sucesivas laminas o capas, que con el transcurso del tiempo se fueron formando por decantación en los fondos marinos, y que posteriormente por los movimientos terrestres de las placas tectónicas afloraron a la superficie. En este caso por la colisión pirenaica, al ir uniéndose la Península Ibérica (por aquel entonces isla) con el subcontinente europeo, creándose los montes Pirineos y el Golfo de Vizcaya. 

Estas capas sedimentarias a semejanza de un pastel "milhojas" o una "tarta contesa", se alternan dependiendo del periodo climático que tocase en ese momento: intercalando una capa dura formada por calizas y generada durante tiempos fríos, sobre una capa blanda compuesta por margas o arcillas durante épocas más cálidas. Esto sucedió una época tras otra, en un proceso variable que se repite cada 20.000 años, correspondiendo cada estrato (capa) a un periodo aproximado de 10.000 años. La sucesión de estas vetas sedimentarias puede llegar a tener hasta 5.000 mts. de grosor y las que vamos a poder visitar contienen la historia de los últimos 50 millones de años de la "vida" geológica de la Tierra, pudiendo leer en ellas como si de las hojas de un libro se tratase, los principales aconteceres que se han producido durante ese tiempo. 

Esta constante periodicidad se produce por el permanente y oblicuo movimiento eje de la Tierra, que semejando la oscilación inclinada de una peonza dura esos 4.000 lustros, correspondiendo la mitad del periodo a estar más próximo al sol (clima templado) y el otro periodo más alejado (clima frio). Pero hoy sabemos que esos periodos "naturales" de oscilación climática, se están alterando de forma artificial por la irresponsable acción del hombre, acelerando el calentamiento del planeta y acercándonos a la extinción, como ya veremos ocurrió hace 65 MA (millones de años). 



El Gran Cañón del Colorado tiene capas que nos enseñan 300 MA de la historia de la Tierra, pero las más antiguas se encuentran en la profundidad del barranco, en lugares prácticamente inaccesibles, de ahí su difícil evaluación. Pero aquí, en la orilla de este impresionante mar podemos obsérvala con relativa comodidad…………… y además está más cerca y es como mas nuestra………….. Siendo la zona más especial, llamativa y atrayente, el tramo litoral ubicado entre las poblaciones guipuzcoanas de Zumaia y Deba, al estar aquí situados las formaciones de flysch más espectaculares, toda vez que los movimientos de la corteza terrestre han situado en posición vertical los estratos rocosos que originariamente eran horizontales. 

Creando un efecto único y sobrecogedor, centrado principalmente en la playa de Itzurun en Zumaia, la punta Algorri, así como la playa de Sakoneta y sus alrededores, sobre todo cuando baja la marea y se puede observar e incluso pasear por la "Rasa Mareal", llegando a generar en nuestra retina imágenes que por mucho mundo recorrido, no tienen que envidiar a otros lugares de más renombre en el planeta, sin duda un espectáculo visual sorprendente. Durante las bajamares, cuando estas son potentes y tienen un coeficiente alto, la Rasa Mareal "surge" del fondo marino hasta alcanzar una anchura de 300 mts. sobre la orilla, pudiéndose transitar por ella y observar su rico ecosistema, aunque las curiosas formaciones de rocas no terminan ahí, pues se extienden por casi 5 km. hacia el interior del mar. 

Además de estos singulares y extraordinarios paisajes, nos situamos en uno de los lugares más importantes del mundo para conocer la historia geológica de nuestro globo terráqueo. Aquí podemos observar con nuestros ojos y tocar con nuestras manos hasta cuatro hechos geológicos de trascendental importancia para el desarrollo del planeta: 



-- El Gran Calentamiento. Ocurrido hace 56 MA (millones de años), cuando la temperatura en el planeta se calcula ascendió entre 5 º y 9 º, durante los 200.000 años que duró esta anomalía. Alteración climática debida a una emisión masiva de gases de efecto invernadero, siendo aquella un 10 por ciento de la tasa que "hoy" acumulamos por gases de efecto invernadero en la atmósfera. Debiendo de comparar estos datos con los actuales, donde superamos un aumento de 1,5º de temperatura en los últimos 100 años, ascenso que de no corregirlo es progresivo. Este evento lo podemos comprobar al acceder a la playa de Itzurun, en una zona definida por rocas rojizas, lugar donde un panel informativo da explicaciones de ello.

-- Cambio de los Polos Magnéticos Terrestres. Suceso acontecido hace 59,2 MA. No siendo un efecto inusual en la historia de la Tierra la inversión magnética de los polos. Esta ubicación en Zumaia de este hecho, fue definida como de importancia especial distinguiéndola como "Estratotipo", siendo por este motivo galardonada con un "Clavo Dorado" (Golden Spike). Trofeo que fue sustraído (robado) en la noche del 21 de febrero de 2019, por alguna mente desequilibrada. Su situación es la playa de Itzurun, bajo la vertical de la rotonda-mirador que se ubica en las proximidades del hotel Zelai.

-- Descenso del nivel del mar. Hecho acaecido hace 61,6 MA, tiempo en que los fondos marinos se hundieron y el mar descendió de nivel unos 80 mts. produciendo un brusco cambio entre calizas (más duras) y margas (más blandas). Podemos observar este suceso en la playa de Itzurun, bajo la vertical de la ermita de San Telmo, estando el estrato señalizado con un nuevo "Clavo Dorado", situado a escasos 25 metros frente al anterior.

-- La Gran Extinción de los Dinosaurios. Relevante suceso producido hace 65 MA. Se trata de una fina capa de color gris-negruzco que marca una de las mayores extinciones de la historia. Pudiéndola, no sin dificultad, localizar semi escondida y sin señalizar en los recovecos de la pequeña cala de Algorri, bajo la vertical de su promontorio (hay que ir con marea baja). Esta pequeña y difusa línea, son los restos expandidos por todo el orbe del impacto de un asteroide caído en Yucatán (México). Su acontecer y ubicación en el flysch de Zumaia, hacen que sea un sitio mágico y misterioso, un lugar donde se pueden tocar las estrellas con nuestras manos. Pues este fino estrato, formado en gran parte por "Iridio", procede que un enorme meteorito de unos 10 km. de diámetro, que se precipitó contra la Tierra a una velocidad de 44.000 k/h. liberando una energía equivalente a la producida por 1.000 millones de Bombas Atómicas como las de Hiroshima. Este suceso, ocurrido al final del Cretácico y su inmediata explosión, cubrió la Tierra de partículas cósmicas y polvo terráqueo, que hizo se oscureciera el planeta durante 700 días, ocasionando un cambio climático que provocó la extinción del 75 % de la vida del planeta (plantas y animales, entre ellos los dinosaurios). Produciendo una destrucción inmediata, causando incendios, terremotos y tsunamis por todo el orbe. Este lugar es de una trascendencia sustancial, ya que nos encontramos en uno de los 5 lugares donde se puede observar esta capa de todo el mundo. 



Aparte de estos trascendentales acontecimientos en la vida de nuestro maltratado planeta, también guardan estas curiosas formaciones de los flysch, potentes cambios climáticos que están "escritos" ellas. Como fue la última glaciación, acaecida hace 18.000 años, donde el nivel de mar estuvo 120 mts. por debajo del actual. 

Estamos ante una costa salvaje e intacta, que se extiende por los casi 10 km. que separan las poblaciones de Zumaia y Deba, una línea marina con potentes, vertiginosos y arriesgados acantilados. Un litoral poco humanizado, que por su difícil acceso ha originado quedar “aislado” de la acción del hombre durante mucho tiempo, no habiendo en sus alrededores ninguna repelente urbanización costera de mal gusto, apenas una docena de caseríos es lo mas alborotador que nos encontraremos. Aunque tuvo su momento "maldito", cuando allá por los años 70 del siglo pasado, se quiso construir una "Central Nuclear" en el lugar paisajísticamente más interesante de todo el entorno, la Punta Mendata y la palaya Sakoneta. Afortunadamente la presión social del los vecinos de Deba, de la comarca entera y de gran parte del pueblo vasco, hizo abortar el proyecto, sirviendo este movimiento como germen para posteriormente conseguir el cierre de la cercana Central Nuclear de Lemoniz, aunque esta tiene una historia diferente y en parte más trágica. 



La costa y su litoral es sugerente, pero la franja inmediata del interior no se queda atrás, ya que por los motivos antes mencionados, y al haber sido comprada gran parte de sus terrenos por la "Iberdola" de entonces hoy "Iberduero" (que es como cambiar mastín por dóberman), y al no ejecutarse al instalación nuclear, estos terrenos fueron comprados por la Diputación de Guipúzcoa y ahora forman parte del "Geoparque", una suerte para los que nos gustan los espacios abiertos y los grandes horizontes. Y aquí es lo que aun podemos encontrar, poco movimiento de vehículos, ninguna vía de comunicación que acceda a la costa, y una verde campiña de interior bucólica y relajada, salpicada únicamente por los tradicionales caseríos de tipología vasca. 



Como reseñas de edificaciones venidas a menos, las ruinas de algún que otro caserío abandonado, así como la también ruina de una atalaya ballenera, que se puede observar en la ladera de Sondabeltza, con la certeza de que ya ha pasado un siglo de cuando se cazó el ultimo cetáceo en estas costas. 

Pero sobre todo hay que recorrer sus inmejorables parajes a través de caminos, una veces por las vertiginosas escarpaduras litorales, otras por bucólicos prados y bosques, pero siempre rezumando de la magia de estos parajes por los que transcurren: la playa de Itzurun, Punta Algorri, Acantilados de Pikote, Ensenada Aitzuri, Punta y Cuevas de Aitzuri, miradores de Baratzazarrak, Portutxiki, Mendatagaina, Itxaspe y el de la Virgen de Itziar, estos dos últimos ya en los flysch negros, así como la regata o barranco de Oskon, descendiendo desde Errota Berri hasta el litoral, rodeado de prados entre higueras, alisos, ciruelos y sauces. Fundamental, allegarse hasta los acantilados de playa y punta Sakoneta, observar la cascada colgada de Mendata y extasiarnos con un atardecer desde la ensenada de Punta Mendata (Punta Aitzuri)…… pero sobre todo en estos últimos lugares recorrer la rasa mareal (con marea baja). Para llegar hasta ellos, usaremos como puntos de partida y referencia: La pequeña población de Elorriaga y su Área de Recreo, Errota Berri (molino nuevo), el acceso al caserío Sakoneta, el Collado de Mendata o el Camping Itxaspe. 



No quiero terminar sin olvidar y haciendo una mención especial al paso por estos lugares de senderos tan reconocidos como el GR-121 (Vuelta de Guipúzcoa), así como el Camino del Norte o Primitivo (Camino de Santiago por la costa), desde los cuales podemos llegar a los sitios aquí reseñados. 

El cine también ha sabido reconocer los singulares valores de estos lugares, plasmando en sus imágenes sitios entrañables de la población de Zumaia, a través de la ermita de San Telmo y la Fuente de San Juan en el film "Ocho apellidos vascos". Pero sobre todo ha sido la cacareada serie "Juego de Tronos" (Game of Thrones) que se rodó parte de ella en la playa Itzurun de Zumaia. 



Por último dejaros 4 imprescindibles consejos para visitar este lugar:   

 - Ir en época de poca invasión urbanita (fuera de las temporadas de verano o similares)

     - Que el tiempo acompañe, pues los caminos con lluvia son bastantes resbaladizos y están algo expuestos en algunos lugares (borde de acantilados).

     - Hay que ir en época de "mareas muy vivas" con un coeficiente muy alto, en el que la diferencia entre "pleamar" y "bajamar" sea bastante acuciado, para aprovechar y recorrer la rasa mareal en todo su esplendor.

     - Que los horarios de la "bajamar" coincidan con nuestra caminata, sobre todo por la playa y los acantilados de Sakoneta y alrededores. 

Para terminar os dejo un video para que pudráis disfrutar de este lugar: